También conocida como Uro Pranayama, la respiración torácica se realiza cuando los músculos intercostales expanden el tórax. Esta respiración se puede realizarse sentado, pero es más cómodo y fácil si te acuestas boca arriba. Asegúrate de estar relajado y enfocarte en la respiración. Evita todas las distracciones; ubícate lejos del teléfono, televisión o cualquier objeto que te pueda distraer. Concéntrate en el tórax, específicamente en las costillas. Levanta las manos y colócalas suavemente sobre la parte superior del pecho. Al momento de inhalar, la región media del tórax se debe llenar de aire. Los pulmones se inflan y como consecuencia el pecho se levanta. Ahora enfócate en la zona media del pecho. Inhala e imagina que la parte frontal, lateral y posterior del pecho se ensanchan, expandiendo toda la caja torácica.
Al inicio puede ser que tengas mayor resistencia a la entrada del aire, a diferencia de la respiración abdominal, donde la entrada de aire es mucho mayor con un esfuerzo menor. Aún así, entra una cantidad considerable de aire con la respiración torácica. Al exhalar, las costillas se juntan y el pecho se hunde. Exhala el aire por completo. Para saber que lo haces correctamente, mantén el abdomen ligeramente contraído en la postura anterior con la palma de la mano situada ahora sobre las costillas; así, puedes sentir cómo se separan al inhalar y como se juntan al exhalar.
Sigue respirando de esta forma unas 6 repeticiones más, poco a poco la resistencia a la entrada del aire irá disminuyendo.
Comentarios
es excelente para reloajarse
esta respiración me encanta